SUPERFICIES
Abandonando todo sueño y esperanza
Sin solo reconsiderar un perdón
Mostrarme la belleza de tu alma
Haciéndome caer en tu red otra vez
Rosas rojas y blancas
Rojo a sangre y pasión
Blanco a pureza de corazón imperceptible
Viejas heridas al descubierto
Nuevos descubrimientos aun más dolorosos
Pasos por dar, fuego por apagar
En un gran vertedero el amor se desperdicia
Ocultos tras una máscara de dureza
El blanco interior sale a la luz en una pequeña lágrima
Ojos ciegos ven la verdad
Bocas mudas dictan los caminos
Dos corazones se rompen a sí mismos
Dulces labios de ángel, sin ser probados
Espinosas mentiras, salen sin parar
Cae al vacio la máscara rompiéndose en pedazos
Y un tierno abrazo mata el silencio
Vivir en un lugar donde aparentemente no te quieren es vacio, doloroso. Es semejante a sentir que caes por un agujero enorme que parece jamás terminar, en ocasiones golpeas contra un rocas o dejas de caer momentáneamente solo para notar que estas totalmente sol@, no me gusta sentir eso, no me gustaría tampoco ser igual a todas las calabazas huecas que parasitan el mundo, solo un puñado de personas ven los colores distintos, solo ese puñado de personas siente los aromas más intensos y solo esas personas sabemos lo que es desperdiciar una caricia, saben esta es la historia de muchas pero vista desde mis ojos que miran con el corazón.
Todos nos bajan el cielo, todos nos regalan las estrellas o nos prometen hacerlo, a cambio de… si de que les demos su momentito de diversión enredados en las sabanas ¿si saben a qué me refiero? Los muchachos que tienen mascaras, nos engañan, nos traicionan y nos lastiman, Julián era su nombre, me decía una dulzura tras otra, acorralaba mis palabras dentro de mi boca al darme un beso, acariciaba mi cabello de una manera tan suave que me hacía sentir que todo estaba bien, salíamos un tiempo cercano a tres meses. El día de nuestro aniversario lo celebraríamos los dos solos en su casa (como si no fuera obvia la propuesta) accedí pues era nuestro cuarto aniversario, sus padres salieron de viaje, después de la cena subimos a su habitación “a ver una película”, todo tranquilo, besos suaves, caricias lentas, luego sus palabras que me recorrieron como un hielo por toda la espalda “quiero que seas mía, como el sol es del cielo y la luna de la noche, entrégate a mí como se entrega el mar al viento, déjame ser el primero y si lo permite tu corazón el único” creo que mi poca experimenta en descifrar los sátrapas que pueden ser los hombres y fue así que en una sola llamarada de caricias y besos fuimos uno, tocando su piel y el la mía, con su cabello en mi rostro y el aroma dulce de sus labios por mi cuello, el brillo el sol me despertó y el canto de los pájaros se transformo en aullido de cuervos cuando note que él no estaba a mi lado, Salí de la habitación y recorrí toda la casa, no encontré ningún indicio de que él estuviera ahí, recogí mis cosas y como un bufón avergonzado Salí agachando la cabeza, caminando por calles solitarias, regreso a chile su ciudad natal y no supe más de él desde ese día, solo supe que se fue al llamar a su casa, sus padres me dieron esa noticia, la máscara que lo cubría logro hundirme, creyendo firmemente es sus palabras, pero al final la verdad se escribió con sangre y esa tinta fue la mía.